viernes, 25 de marzo de 2011

Sobre un comentario de rios en el blog de Javier Subirá

París: El Sena, salón de estar acuático. Escala justa entre las orillas. Vida de ciudad, de calle, que siempre abrazó su río.
Londres: Vida hacia la "casa y los interiores". El río, un adorno de paisaje y escenario de arquitecturas. La ciudad se mira en él desde fuera, sin implicarse, un espejo.
Venecia: con la escala de Paris,  pero con el punto de vista mas bajo. El gran Canal: canal particular para los señores de los palacios. Las calles no lo bordean, llegan, se asoman y se van... para no molestar a los señores. Agua vista desde agua
Viena no tiene río. Esta fuera, en el borde.  Viena añora a su río. Por eso le escribe canciones y poesias, como a una amada lejana.
Oporto vive su río condicionado por la topografía que la defendió. Las calles son afluentes que vuelcan a un puerto que quiere ser de mar y en realidad lo parece.
El Arno pasa muy ancho y plano por Florencia. Es tan importante y orgullosa la Arquitectura que nunca ha querido la competencia del río y se ha ido hacia adentro. Bajas densidades llegan a sus orillas y comunican poca vida. El puente es una isla. 
Conozco poco Praga y menos el Moldava y "su gehry" , pero si Gehry se empeña todos los paisajes de las ciudades y los campos serán paisajes Gehry.  ¡que formas tan monótonas!  JMS

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